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2 de marzo de 2006

beautiful freak

en algún momento de mi adolescencia, o de mi pre-, a mi viejo se le ocurrió una teoría casi incontestable: si uruguay fue una potencia futbolística a pricipios del siglo veinte, durante toda la primera mitad, y luego espectacularmente dejó de serlo, esa caída se debió a los por todos conocidos problemas sociales y políticos en el uruguay de los sesenta, a la decadencia de la cultura “democrática”, a la autoridad brutal que, sin duda, y para mayor penuria de los ciudadanos y de las ciudadanas uruguayas de la época, se impuso en dicho país. en plan de comparar la decadencia de una cultura futbolística con la decadencia más o menos evidente de todo un país, que pasó en menos de un siglo de ser una especie de tierra prometida a ser una basura tercermundista más, como todas. como todas las que somos.

a ser un ecuador más, por ejemplo, un país que importa nada más en el grado en el que sus acciones afectan a las supuestas “potencias” vecinas, que no son potencias ni por ahí pero que a veces efectivamente se lo creen... aunque, para volver al caso del uruguay, con brasil y argentina al lado, mucho más con fundamento que nuestras por sí mismas (y, tristemente, a veces por los ecuatorianos y las ecuatorianas) así llamadas “potencias” vecinas.

la teoría de mi viejo es interesante, aunque me parece que, empíricamente, es insostenible.

no explica por ejemplo por qué, cuando el brasil también cayó en la barbarie, desde el 1964, a más tardar, siguió podiendo seguir bastante soberanamente (muy a mi pesar) ser cada vez que se daba la oportunidad campeón del mundo, no sólo en el 1970 (o sea, en medio de la dictadura), sino también mucho después, en los noventas, cuando la teoría implica que aquí hubo una destrucción casi sistemática de generaciones de deportistas por culpa de políticas equivocadas y del bestialismo de las dictaduras (bajo las cuales estaban por cierto los campeones no sólo brasileros de 1970, sino también los italianos de 1934 y los argentinos de 1978).

uruguay parece haberse retirado, en efecto, desde hace ya décadas, del plano futbolístico mundial respetable. hasta qué punto tenga esto que ver con su historia política, social, económica, es una cosa que se puede plantear así, jaliscamente, como alguna vez la planteó mi viejo, pero que no parece tener mayor peso en el análisis histórico final (pese a ese gol del gran ecuatoriano del nacional... ¿jiménez?, de 1989, que fue pasado en la tele ecuatoriana tantas veces como el choque de los aviones del once de septiembre en la televisión mundial, o casi tantas como en las que se repite la por otro lado bastante estúpida historia de abdón calderón en las escuelas del ecuador).

ahora bien, y por otro lado, o acaso por el mismo lado, no me queda más que reconocer que lo jalisco y provocador lo saqué de mi viejo, y que esa actitud es la mía. será el dna. que de él aprendí a plantear tesis que, si a lo mejor en última instancia son insostenibles, son de todos modos inspiradoras y desafían a todo aquel que se quiera meter con elllas a que ya pues... se meta con ellas. demuestren, pues, que la historia del fútbol y de la política mundial no pueden ser equiparadas así, uno a uno. yo estoy seguro de que mi viejo opinaba lo que opinaba con el mismo rebuscado y escondido sarcasmo con el que yo lo estoy describiendo ahora, entre otras cosas porque lo hacía cuando alemania llegó a campeón mundial en 1990.

y que alemania luego se cayó como el uruguay (aunque esto no lo podía saber mi viejo, por más sabio que sea/haya sido).

o sea, que alemania gane en 1990 sigue siendo una cosa muy conforme con la historia mundial, claro. casi que demasiado conforme. deutschland, deutschland über alles (y eso no fue necesariamente bueno para alemania, pero sí para el recrudecimiento del nacionalismo alemán).

tenemos también fenómenos absurdos como los ingleses ganando por un gol robado en 1966... ahí no hay explicación histórica. a menos que el árbitro haya sido neo y haya podido ver más allá de la matrix y haya sabido más...

tenemos también a la alemania de hoy, del 2006, perdiendo vergonzosamente 4-1 contra italia (este partido incomprensible es el que me lleva a escribir ahora) en un partido amistoso en que si los italianos, a quienes algunos lectores de este blog odian, y quienes en todo caso no son precisamente conocidos por salir a golear, dominaron al penoso equipo alemán todo el tiempo y eso. era como si lo llevaran de la correa. cuando se acostaban a descansar, los italianos, los alemanes lograban medio llegar cerca del área contraria. en una de esas hasta metieron un gol.

pero es que era evidente que los italianos dominaban tanto que, en el momento en el que se levantaban, le metían literalmente miedo a los alemanes.

y yo me preguntaba todo el tiempo... ¿por qué? alemania es tricampeón, es el país anfitrión del mundial. es uno que debería ir de igual a igual...

pero no es así. desde hace más de cinco años, los alemanes no le han logrado ni empatar a un equipo “grande”: brasil, argentina, holanda, francia, inglaterra, italia, la república checa... dejémonos de devaluar.

en efecto, cuando uno vive en alemania uno tiene todo el tiempo la cantaleta de que el equipo de alemania no es un “grande” (pese a sus tres campeonatos). pero por otro lado se consideran, claro, favoritos en el mundial.

y yo no es que no quiera compadecerme de los alemancitos, que la verdad es que jugando como jugaron hoy no merecen llegar ni a octavos de finales. es sólo que me pregunto, aplicando la teoría de mi viejo, ¿qué pasó? reunificación, como se le llamó a la anexión, y todo bien... y después una caída impresionante (aunque en las olimpiadas de invierno los alemanes acaban de salir muy bien parados)...

¿es esa la historia que se está produciendo ante nuestros ojos?

no lo creo: yo creo que más bien esto del fútbol no puede ser comparado con lo demás, así de uno a uno. aunque sin duda se pueden armar paralelos interesantes. y que muy interesante sería armarlos.

en todo caso, hoy me cabreó mucho que alemania perdiera 4 a 1 conta italia, y que obviamente todo el aparato periodístico alemán criticara al equipo alemán, pero que inmediatamente después pasaran imágenes de un partido en el que ecuador, país de nada en cosas de fútbol (y no sólo en cosas de esas) le saca un casi glorioso 0:1 a holanda, perdiendo, claro, pero en todo caso perdiendo sólo por uno a cero, y esto en holanda, y que los periodistas comentaran que es que es lógico porque ecuador es un equipo de nada (en lo que parcialmente tienen razón), pero que a nadie se le hubiera ocurrido decir que a lo mejor el equipo alemán tendría que tener un poco más de cuidado porque la verdad es que holanda es todavía más favorito que los italianos...

soundtrack: un disco de éxitos diversos de johnny cash que me compré de puro imbécil después de ver walk the line, que comentaré en el siguiente post. johnny cashito, después de ser nirvanito, pues...

a mí esto del fútbol no me va, pero no he escrito lo que he escrito para recibir los comentarios tan añorados por holsten. es sólo que vi estos partidos y me cabreé, por esta posición tan obviamente neo-colonial de los comentadores. pero qué se puede esperar de comentadores de fútbol, claro, que en todos los países son más bien imbéciles... si no, no serían comentadores de fútbol....

una teoría del fútbol sería, por otro lado, interesante. que yo sepa, nadie se ha lanzado a elaborarla así, en serio, fuera de las cosas que se dicen en familia, o que dice galeano en sus libros un poco sentimentales que no pueden ser considerados como teóricos...

pero con la presentación de alemania de hoy casi que dan ganas de decir que a lo mejor de verdad llegamos a octavos de final, los ecuatorianos. están remalos de verdad, los alemanes, a lo mejor llegamos...

sin palabras, al igual que cualquier futbolista o que cualquiera que quiera analizar el fútbol sin irrespetarlo...

chaos (and that`s an order).

pd: no soy tan bruto como creen, la próxima no tiene nada que ver con el fútbol.

pd 2: beautiful freak, that's me. por lo menos por lo de beautiful.

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